jueves, 24 de enero de 2013

Ruta cervantina de Sevilla



Para poder llevar a cabo esta Ruta es conveniente conocer previamente dos de las Novelas Ejemplares de Miguel de Cervantes y Saavedra: Rinconete y Cortadillo y Coloquio de Cipión y Berganza ya que en ellas se citan lugares concretos de nuestra ciudad que serán el hilo conductor de nuestra actividad. Más conveniente es, incluso, llevarse un ejemplar de cada obra para poder leer in situ los fragmentos indicados, si es que alguien se decide a seguir esta ruta.

En 1916, con motivo del tercer centenario de la muerte del genial escritor, el Ayuntamiento de la ciudad decidió colocar diecisiete azulejos situados en diferentes lugares en los que se recuerdan las menciones hechas por el Príncipe de los Ingenios.


Itinerario

1. Entre Cárceles

Comenzamos la ruta cervantina ante el monumento dedicado a su memoria en la calle Entre Cárceles donde se recuerda al genial escritor.

En calla Sierpes, en la antigua Cárcel Real contigua a Entre Cárceles, un azulejo recuerda la estancia de Cervantes en la antigua penitenciaria de la siguiente manera:

En el recinto de estas casas, antes Cárcel Real, estuvo preso entre 1597-1602, Miguel de Cervantes Saavedra. Aquí se engendró para asombro y deleite del mundo El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”.

2. La Cuesta del Rosario

La Costanilla, denominada así desde el siglo XV y que va desde Francos a Pescadería, es el lugar donde aparece uno de los azulejos en el que reza:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona esta calle llamada un tiempo de "la Costanilla" como una de las tres cosas que el rey tenía por ganar en Sevilla en la Novela Ejemplar Coloquio de Cipión y Berganza”.

En este punto sería interesante leer unos fragmentos de esta Novela Ejemplar:

Por maravilla se pasa día sin pendencias y sin heridas, y a veces sin muertes; todos se pican de valientes, y aun tienen sus puntas de rufianes; no hay ninguno que no tenga su ángel de guarda en la plaza de san Francisco, granjeado con lomos y lenguas de vaca. Finalmente oí decir a un hombre discreto que tres cosas tenía el Rey por ganar en Sevilla: la calle de la Caza, la Costanilla y el Matadero”.




3. En calle Laraña

En la fachada renacentista de la Iglesia de la Anunciación podemos contemplar otro de los azulejos que hacen referencia a la huella de Cervantes en nuestra ciudad. En el mismo se puede leer:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona el estudio de la Compañía de Jesús establecido en estas casas, hoy Universidad Literaria, en la Novela Ejemplar Coloquio de Cipión y Berganza”.

Ante la fachada anteriormente mencionada sería provechoso hacer una breve reflexión sobre el movimiento renacentista y sus repercusiones en el mundo de la cultura y el arte y, a continuación, leer otro fragmento de la misma Novela Ejemplar:

Cipión. - Así es verdad, y yo confieso mi yerro y quiero que me le perdones, pues te he perdonado tantos. Echemos pelillos a la mar, como dicen los muchachos, y no murmuremos de aquí en adelante; y sigue tu cuento, que le dejaste en la autoridad con que los hijos del mercader tu amo iban al estudio de la Compañía de Jesús”.

4. En calle Huelva

Aunque en el azulejo se menciona la novela Rinconete y Cortadillo, la cita corresponde a Coloquio de Cipión y Berganza y en él se dice:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona esta calle nombrada un tiempo de la Caza antes de la Gallinería, como una de las tres cosas que el rey tenía por ganar en Sevilla”.

5. La Puerta de la Carne

Una actividad muy interesante para comprender mejor el itinerario es haber recogido información sobre diversas puertas de la ciudad especialmente de aquellas que se mencionan en la obra de Cervantes. Al llegar al lugar nombrado en la novela como Matadero podríamos pensar en el funcionamiento de la ciudad amurallada y la importancia de las distintas puertas.

El azulejo que menciona el lugar está colocado en la fachada de la Diputación provincial de Sevilla. En él se puede leer:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona el “Matadero”, próximo a este lugar como... una de las tres cosas que el rey tenía por ganar en Sevilla, imaginando, como ocurridos en él. Peregrinos episodios de la Novela Ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

6. Plaza Jesús de la Pasión (antigua Plaza del pan)

En ese lugar tan frecuentado se recuerda la actividad literaria de Cervantes con un azulejo en el que se dice:

El Príncipe de los Ingenios Españoles, Miguel de Cervantes Saavedra imaginó como ocurrido en el ámbito de esta plaza llamada un tiempo de San Salvador, luego de la Fruta y del Pan, uno de los más donosos episodios de la Novela Ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

En dicha novela nos dice Cervantes:

Avisóle su adalid de los puestos donde habían de acudir: por las mañanas, a la carnicería y a la plaza de San Salvador; los días de pescado, a la Pescadería y a la Costanilla; todas las tardes, al río; los jueves, a la Feria.

Toda esta leción tomaron bien de memoria, y otro día bien de mañana se plantaron en la plaza de San Salvador; y, apenas hubieron llegado, cuando los rodearon otros mozos del oficio, que, por lo flamante de los costales y espuertas, vieron ser nuevos en la plaza; hiciéronles mil preguntas, y a todas respondían con discreción y mesura. En esto, llegaron un medio estudiante y un soldado, y, convidados de la limpieza de las espuertas de los dos novatos, el que parecía estudiante llamó a Cortado, y el soldado a Rincón”.

7. Las Gradas de la Catedral

En este lugar se recuerda la obra cervantina de la siguiente manera:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona estas Gradas, lugar un tiempo de contratación en la novela ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

Al llegar a este punto se debe contemplar del monumento más representativo de
la ciudad y puede resultar interesante la lectura de unos fragmentos de Rinconete y Cortadillo:

Sacó, en esto, de la faldriquera un pañuelo randado para limpiarse el sudor, que llovía de su rostro como de alquitara, y, apenas le hubo visto Cortado, cuando le marcó por suyo. Y, habiéndose ido el sacristán, Cortado le siguió y le alcanzó en las Gradas, donde le llamó y le retiró a una parte; y allí le comenzó a decir tantos disparates, al modo de lo que llamaban bernardinas, cerca del hurto y hallazgo de su bolsa, dándole buenas esperanzas, sin concluir jamás razón que comenzase, que el pobre sacristán estaba embelesado escuchándole”.

8. En la calle Alcaicería

Aunque no está bien ubicado este azulejo puede hacer mención al espacio que actualmente ocupa la Plaza de la Alfalfa, donde pudieron estar situados determinados espacios de la ciudad, entre ellos la Pescadería:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona este lugar llamado un tiempo de la Carnicería en la Novela Ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

Procede realizar aquí la lectura del siguiente fragmento de la mencionada novela:

Dijéronme que iban en seguimiento de un ganadero que había pasado ciertos carneros en la Carnicería, por ver si le podían dar un tiento en un grandísimo gato de reales que llevaba. No desembanastaron ni contaron la ropa, fiados en la entereza de mi conciencia; y así me cumpla Dios mis buenos deseos y nos libre a todos de poder de justicia, que no he tocado a la canasta, y que está tan entera cuando nació”.

9. Calle Santo Tomás

En ese lugar se encuentra la Torre de Abd-el-Aziz (siglo XII). El azulejo que recuerda la obra cervantina situado en este lugar dice:

El Príncipe de los Ingenios Españoles, Miguel de Cervantes Saavedra menciona el Postigo del Alcázar que estuvo en lugar próximo a éste en la novela ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

10. El Postigo del Carbón

El azulejo que hace mención a la Puerta de la Aduana, hoy desaparecida, está mal ubicado pues se encuentra en la calle Núñez de Balboa. En él se puede leer:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de cervantes Saavedra menciona esta puerta llamada un tiempo "de la Aduana" y antes de los "Azacanes", imaginando que por ella entraron Rinconete y Cortadillo”.

Aquí sería conveniente leer otro fragmento de la obra:

Con todo esto, a la entrada de la ciudad, que fue a la oración y por la puerta de la Aduana, a causa del registro y almojarifazgo que se paga, no se pudo contener Cortado de no cortar la valija o maleta que a las ancas traía un francés de la camarada; y así, con el de sus cachas le dio tan larga y profunda herida que se parecían patentemente las entrañas, y sutilmente le sacó dos camisas buenas, un reloj de sol y un librillo de memorias, cosas que cuando las vieron no les dieron mucho gusto; y pensaron que, pues el francés llevaba a las ancas aquella maleta, no le había de haber ocupado con tan poco peso como era el que tenían aquellas preseas, y quisieran volver a darle otro tiento; pero no lo hicieron, imaginando que ya lo habrían echado de menos y puesto en recaudo lo que quedaba”.

11. Baratillo

En un lugar de tanto tránsito de gente que iban y venían de Triana a Sevilla cruzando el puente de barcas accedían a la ciudad a través la Puerta del Arenal donde se instalaba una especie de mercadillo denominado como baratillo o malbaratillo.

En la calle Adriano encontramos un azulejo que rememora este lugar mencionado en la obra cervantina:

El Príncipe de los Ingenios Españoles Miguel de Cervantes Saavedra menciona este lugar donde en un tiempo se hacía malbaratillo en la Novela Ejemplar Rinconete y Cortadillo”.

Para terminar la ruta puede leerse un fragmento de la Novela Ejemplar donde se hace referencia a este lugar:

Habíanse despedido antes que el salto hiciesen de los que hasta allí los habían sustentado, y otro día vendieron las camisas en el malbaratillo que se hace fuera de la puerta del Arenal, y dellas hicieron veinte reales. Hecho esto, se fueron a ver la ciudad, y admiróles la grandeza y sumptuosidad de su mayor iglesia, el gran concurso de gente del río, porque era tiempo de cargazón de flota y había en él seis galeras…”.

Glosario

adalid 2. m. Guía y cabeza o muy señalado individuo de algún partido, corporación o escuela.
almozarifazgo m. Impuesto aduanero que se pagaba por el traslado de mercaderías que ingresaban o salían del reino de España o que transitaban entre los diversos puertos (peninsulares o americanos), equivalente al actual arancel.
alquitara f. Alambique o aparato que sirve para destilar o separar de otras sustancias más fijas, por medio del calor, una sustancia volátil (que se evapora fácilmente, como, por ejemplo, el alcohol). Se compone de un recipiente para el líquido y se continúa por un conducto que arranca del recipiente y se continúa por un serpentín por donde sale el producto de la destilación.
anca 3. Cadera de una persona.
5. ant. Muslo de una persona.
azacán 2. m. Aguador.
3. ant. Odre, cuero para líquidos.
bernardina f. fam. Fanfarronada.
camarada 2. com. El que anda en compañía con otros, tratándose con amistad y confianza.
cargazón 1. f. Cargamento.
concurso 1. m. Concurrencia, conjunto de personas.
convidar 2. tr. fig. Mover, incitar.
costal 3. m. Saco grande de tela ordinaria, en que comúnmente se transportan granos, semillas u otras cosas.
dellas Contracción desusada de de ellas.
desembanastar 1. tr. Sacar de la banasta (cesto) lo que estaba en ella.
embelesar 1. tr. Suspender, arrebatar, cautivar los sentidos.
espuerta 1. f. Especie de cesta de esparto, palma u otra materia, con dos asas, que sirve para llevar de una parte a otra escombros, tierra u otras cosas semejantes.
faldriquera 1. f. Bolsillo de las prendas de vestir.
Bolsillo que se atan las mujeres (y los hombres) a la cintura y llevan debajo del vestido o delantal.
gato 2. m. Bolso o talego en que se guardaba el dinero.
3. Dinero que se guardaba en él.
hurto 1. m. Acción de hurtar.
2. Cosa hurtada.
leción 1. f. ant. Lección.
malbaratillo 1. m. p. us. Tienda de cosas de poco precio o de lance.
picar 45. tr. fig. Preciarse, jactarse de alguna cualidad o habilidad que se tiene.
presea 1. f. Alhaja, joya, tela, etc., preciosas.
randado 1. adj. Adornado con randas (guarniciones, encajes de bolillos, etc.).
rufián 2. m. fig. Hombre sin honor, perverso, despreciable.
sumptuosidad 1. f. ant. Cualidad de suntuoso (magnífico, grande y costoso).
tiento 5. m. Pulso, seguridad y firmeza de la mano para ejecutar alguna acción (por ejemplo, robar).
valija 1. f. Maleta.
yerro 2. m. Equivocación por descuido o inadvertencia, aunque sea inculpable.



Localización de los lugares de la ruta

1 comentario:

  1. Tienes que añadir nuevos puntos de información en el mapa, junto con las citas de textos literarios que hayas seleccionado por cada autor.

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