Hoy en día hay mucha diversidad de estilos de vestir. Pero la globalización ha hecho que cada vez nos vistamos todos iguales aunque vivamos en diferentes territorios.
Cada persona tiene un estilo por el que se caracteriza. Muchos intentan seguir sus propia forma de vestir acorde con su personalidad. Pero muchos se dejan llevar por la moda, los amigos o la música.
Muchos copian estilos de famosos, otros de sus amistades y otros se limitan a marcar el suyo propio para que otros quieran vestir como ellos.
Algunos de los estilos mas conocidos son:
Hipster.
Es una subcultura de jóvenes y adultos de establecimiento a la alta urbana.
Los hipster suelen elegir ropa tipo vintage de ningún diseñador conocido, acompañado de la última tecnología como iPhone o iPad. Llevan gafas de pasta de Ray Ban Wayfarers. Normalmente las chicas llevan leggins con estampados étnicos, de colores chillones o de rayas. El calzado que llevan casi siempre son Vans de todos los colores o los Toms. Suelen llevar el pelo largo y de colores. La mayoría de las chicas hipster se hacen las conocidas 'californianas' en rubio, rosa, azul, etc..
Estilo casual.
Es un estilo chic, con pequeños toques de glamour y con algo de brillo.
Las prendas que caracterizan este estilo son los jeans, las faldas de tubo, los vestidos con botas planas, las blazers de 1 o 2 botones, las camisas de cuello con escote y las blusas y camisas con brillos. Los elementos que le dan un toque chic a estas prendas tan casuales son los tocones altos, gafas, carteras y pulseras, pero sin quedar muy recargado.
Rockero.
El estilo rockero trata de combinar elementos de rebeldía y transgresión para crear un estilo particular.
Cada grupo tiene sus preferencias, pero hay prendas que suelen repetirse. Los chicos suelen ir con chaquetas de cuero negras, pantalones pitillo ajustados negros o rojos y camisas a cuadros ideales para llevarlas abiertas encima de la camiseta. De calzado unas botas negras al estilo Dr. Martens.
Las chicas llevan vestidos ajustados en tonalidades oscuras, con medias de rejilla o rasgadas, prendas que llevan tachuelas y de calzado unas converse en negras o unas botas de tacón.
Skater. La moda skater proviene de California, por los que practicaban este deporte por sus ciudades.
Muchos skaters se dejan un gran flequillo que cubre sus frentes y encima gorras de visera recta normalmente de marcas famosas como OBEY. Llevan camisetas y sudaderas anchas con logos populares. Llevan pantalones cómodos con los que pueden realizar trucos y maniobras. Usan calzado que tenga buena tracción para patinar pero que también sean modernos y con cordones lisos.
La lírica popular en la Edad Media es un misterio lejano en el tiempo, pero cercano en el espíritu. Aunque la organización de una sociedad en estamentos, sin apenas posibilidad de cambio, nos resulte incomprensible e insufrible, los testimonios supervivientes de la lírica nos aproximan la experiencia humana de los jóvenes y las mujeres, que se expresa de similar manera entre distintas etnias en comunicación: cristianos, judíos y musulmanes. La Península Ibérica en el medievo es un espacio abierto, conflictivo y dialógico para el intercambio cultural, desde el siglo VIII hasta el XVII, es decir, hasta la expulsión de judíos y moriscos. A partir de las formas y temas de la lírica medieval surgieron las múltiples especies de la canción, tal y como ahora la conocemos: seguidilla, copla, villancico. Del romancero hispánico, cada vez más depurado y afín a la lírica, nacieron las baladas románticas, que cuentan historias de encuentro, amor, separación, esperanza o tragedia.
2. Canción con estribillo
La
lírica europea surge en el medievo con muchos rasgos en común, tanto en las
lenguas románicas como en las germánicas:
- Asociada
a la música, al igual que en cualquier cultura.
- Con
una estructura estrófica, basada en:
- La
rima (asonante-consonante), aunque la medida sea variable (isosilábica en la
poesía culta, irregular en la canción popular).
- El
estribillo: varios versos (dos, tres o cuatro) que se repiten al principio y al
final del poema o después de cada estrofa.
- Otros
paralelismos: un pareado con la misma rima al final de la estrofa (tornada,
vuelta,
etc.).
Hay dos
teorías histórico-literarias que pretenden explicar su origen. En realidad, ambas son compatibles:
– Romanista:
Supone que el estrofismo era
propio de la lírica popular prerromance y se contagió a las formas de la poesía
andalusí.
– Arabista:
Defiende que la lírica hispanoárabe influyó decisivamente en las creaciones de
los trovadores e incluso en la lírica popular, gracias a un continuo contacto
entre culturas, a través de la frontera peninsular.
3. Al Ándalus sentido
4. Moaxajas, jarchas y zéjeles
La unidad entre poesía, música y danza está en el origen de la lírica como género.
En ese crisol prevalecen el ritmo y los paralelismos del estribillo, aunque la melodía irá desarrollándose para dar origen a la organización en estrofas.
Moaxajas
y zéjeles coinciden en tener una estructura estrófica, basada en la repetición
de una rima con vuelta, al final de cada una de ellas:
•Moaxaja:
aa, bbbaa, cccaa,
etc.
•Zéjel:
aa, bbba, ccca,
etc.
Además,
su forma métrica está determinada por su música. Pero
difieren en otros aspectos.
La
moaxaja (muwassaha) se
compone en árabe clásico, aun cuando concluya en una estrofa de dos, tres o
cuatro versos: la jarcha (harya),
–en
dialecto árabe hispánico (la mayoría de las conservadas)
–en
romance andalusí(“mozárabe”), un 14% de
ellas.
El
género de la moaxaja se adaptó a la lírica judía en lengua hebrea; su uso se
hizo común en la Península, hasta el punto que se han conservado más jarchas
romances en poemas hebreos y se han transmitido en mejor estado textual que en textos árabes.
El
zéjel se escribe íntegramente en árabe andalusí, aun cuando incorpora palabras
aisladas de origen románico; se caracteriza, según Federico Corriente, por
basarse en una entonación intensiva, ya no cuantitativa.
Las
moaxajas sobrevivieron a la desintegración y caída de Al-Andalus; el
género se cultivó con gran éxito en el Próximo Oriente y los poemas andalusíes
se transmitieron de forma oral en el marco de las comunidades sufíes del Norte
de África (nuba),
hasta Mauritania y Níger (rito de la sa’ana).
Por su parte, el zéjel se adaptó a las lenguas hispánicas a través de la tradición popular, como en la canción de "Las tres morillas":
Tres moricas me enamoran
en Jaén:
Axa y Fátima y Marién.
Tres moricas tan garridas
iban a coger olivas,
y hallábanlas cogidas
en Jaén:
Axa y Fátima y Marién.
Y hallábanlas cogidas
y tornaban desmaídas
y las colores perdidas
en Jaén:
Axa y Fátima y Marién.
Tres moricas tan lozanas
iban a coger manzanas
y hallábanlas tomadas
en Jaén:
Axa y Fátima y Marién.
Díjeles: ¿Quién sois, señoras,
de mi vida robadoras?
Cristianas que éramos moras
en Jaén:
Axa y Fátima y Marién.
Versión de Federico García Lorca
5. Raíces comunes con la lírica culta
Los
primeros trovadores y cantoras en las cortes de nobles y reyes (ss. XII y XIII)
adaptan las formas y los estilos musicales al gusto de los cortesanos. La inspiración popular sobre las relaciones amorosas se mezcla con otra línea creativa que procede del platonismo y la “religión del
amor” hispanoárabe: el amor cortés, con sus ventajas e inconvenientes. El
ritual del amourcourtois
impone un orden de relaciones adaptado rígidamente al feudalismo, que intenta distinguirse de la muchedumbre y situar la
identidad del estamento nobiliario por encima del pueblo llano. Durante
varios siglos (XII-XIV), los nobles hispánicos no reconocen otra lírica que la
escrita por trovadores en gallego y catalán: Alfonso X el Sabio ordena recoger
las cantigas. Tan
solo lascantigas
de amigo usan
el estribillo y el paralelismo, como en los cantos populares (Martín Codax).
Quantas sabedes amar amigo
treydes comig’ a lo mar de Vigo: E banhar-nos-emos nas ondas!
Quantas sabedes amar amado
treydes comig’ a lo mar levado: E banhar-nos-emos nas ondas!
Treydes comig’ a lo mar de Vigo
e veeremo' lo meu amigo: E banhar-nos-emos nas ondas!
Treydes comig’ a lo mar levado
e veeremo' lo meu amado: E banhar-nos-emos nas ondas!
La cançócatalano-provenzal
(Peire
Vidal, Marcabrú,
Guillem de Bergedá,
entre otros muchos), así como la canción italiana (siciliana, dolcestilnuovo), utilizan las estrofas y la rima; pero reserva el estribillo para las danzas. La
relación entre nobles y mujeres del pueblo se representa de modo burlesco: las pastorelas (en
castellano, serranillas).
6. Villancico
El vocablo procede de villa y villano: composición de origen popular en el medio rural. Hasta el s. XV, se llamaba “cantiga” a la forma estrófica con estribillo. Sin
embargo, la estructura del villancico es algo distinta de las cantigas gallegas:
– No
se exagera tanto el paralelismo (cfr. el leixa-pren gallego).
– Los versos tienen entre seis y ocho sílabas.
– Alternan
estrofas cantadas por un solista y por el coro (estribillo).
– El
orden interno de las estrofas se asemeja al zéjel (así
llamado también en castellano):
• estribillo
de dos a cuatro versos
• coplas:
dos mudanzas
(cuatro versos de rima distinta: soleá, redondilla, cuarteta) y una vuelta
(rima
combinada: mudanza y estribillo).
Riu, riu, chiu,
La guarda ribera,
Dios guardó el lobo
de nuestra cordera.
El lobo rabioso
La quiso morder,
Mas Dios poderoso
La supo defender,
Quizole hazer que
No pudiesse pecar, (sic)
Ni aun original
Esta virgen no tuviera.
Riu, riu, chiu,
La guarda ribera,
Dios guarde el lobo
De nuestra cordera.
Este que es nascido
es El Gran Monarca /
Cristo Patriarca
de carne vestido /
Ha nos redimido
con se hacer chiquito /
Aunque era infinito
finito se hiciera.
[...]
Muchos
de los villancicos conservados son versiones que conservan el estribillo o aprovechan uno existente, con una forma estrófica variadísima: seguidilla, copla, soleá, pareado; rima asonante o consonante. Se hizo frecuente “glosar” un estribillo aislado, para referirse a un asunto
cortesano o, desde el siglo XVII, un tema religioso y específicamente navideño.